Aquéllos maravillosos años

La esperanza es algo que se les suele dotar a los seres humanos. Una esperanza de que las cosas cambien, siempre para mejor. Afortunadamente, hay esperanzas y sueños que terminan cumpliéndose. El ejemplo más claro lo tenemos en el dueto Brian Clough – Peter Taylor. Un dueto clave que cambiaría la vida de dos clubs modestos: el Derby County y el Nottingham Forrest.

Un sueño que nunca le faltó Borussia Mönchengladbach. En 1965 se asentó en la Bundesliga y que a partir de 1970, empezaron a hacerse realidad. Al menos en lo que era entonces la Bundesliga, una competición joven y unificada pese al panorama político de la época.

Los años dorados del club, comenzaron a partir de 1970 con la llegada de Hennes Weisweiler al equipo. Weisweiler ya conocido en el panorama futbolístico alemán tras su paso por el FC Köln, dotó a «los potros» de la capacidad necesaria así como disciplina mezclado con una dosis de talento que catapultaría a la Alemania Occidental de entonces. Nombres como Berti Vogts, Rainer Bonhof, Gunter Netzer o Jupp Heynckes se encontraban bajo su mando. Comenzaba así, un lustro en donde  mantendría una dura pugna por el dominio doméstico con el Bayern de Múnich comandado por Franz Beckenbauer y secundado por «Torpedo» Müller. Una rivalidad que se mantendría en la década.

El Mönchengladbach estaba de moda. Sobrevivió en la parte alta de la tabla, tras la marcha de Weisweiler al FC Barcelona del entonces presidente Agustín Montal. Dos ligas y una DFB Pokal fue su contribución. Luego se vieron impotentes ante el equipo bávaro en la competición doméstica. Una vez consumada la marcha de Netzer, llegaron nuevos jugadores jóvenes y que renovarían al Gladbach: Uli Stilieke y los daneses Simonsen y Jansen.

En Europa, solo la mala suerte impidió reinar al équipo de Renania-Westfalia. Primero, tras arrollar al Inter de la época con un 7-1 y haciéndoles repetir el partido, tras el impacto de un objeto en la cabeza del delantero del Inter, Boninsegna en el minuto treinta de la segunda parte. Motivo que hizo volver a repetir el partido en Berlín. El empate a 0 primero y la derrota en el Giuseppe Meazza por 4-2 acabaron con las esperanzas de entonces.

http://www.youtube.com/watch?v=zLFHFCW-kpE

La llegada de Stilieke y los daneses suponen un salto de calidad a la plantilla. Tanto es así que al final logran la Copa de la UEFA en 1975 tras ganar al Twente holandés por 1-5 y dejar la vuelta en prácticamente un trámite (0-0). Este triunfo es en parte al mítico Udo Lattek, que también conseguiría 3 ligas más, aprovechando el bajón de calidad del Bayern.

No obstante, su otra bestia negra (esta vez la internacional) fue el Liverpool de Kevin Keegan, le aparta una vez más, de saborear las glorias de ganar una Copa de Europa. Era el glorioso Liverpool de los años 70. Éstos renunciarían a jugar la Intercontinental, así que se jugaron dicho trofeo ante el Boca Juniors, trofeo que también perdieron.

http://www.youtube.com/watch?v=fTAICt9Etxs

Decepcionante era el adjetivo adecuado para los aficionados del «Gladbach». Hasta 1979 en la que cierran sus gloriosos años 70, ganando una Copa de la UEFA al Estrella Roja de Belgrado de la extinta república yugoslava. Con la salida del danés Simonsen, se da por concluída esta gloriosa década que siempre permanecerá en la memoria de todos los veteranos aficionados que iban con regularidad al Bökelbergstadion.Plantilla del Borussia Mönchengladbach 2011-2012″]

Hoy es diferente. El Mönchengladbach ha concluido una temporada muy por encima de donde se le esperaba. Planteando batallas a los grandes de la Bundesliga, situándose en la zona alta desde el principio. Después de esta temporada, Favre ha situado al equipo en la elite y a buen seguro que los aficionados no querrán bajarse de ese escalón. Un pedestal que les recuerda a los gloriosos 1970 gracias a aquél combativo espíritu.

El espíritu de aquellos maravillosos años.