Badstuber, el gallardo Pechvogel
El central del FC Bayern München, Holger Badstuber, vuelve a ser una baja para el equipo. Esta vez no es debido a su recurrente lesión de ligamentos, pero sí a una fractura de tobillo. Pocos jugadores han tenido una carrera tan interrumpida.
Pechvogel es una expresión del alemán que se traduce algo como «pájaro de lamentos». Hace referencia a aquella persona que sufre un contratiempo tras otro. Definitivamente, de haber un Pechvogel en el fútbol alemán éste sería Holger Badstuber.
Su prometedora carrera ha sido reducida y opacada por una frustrante y difícil seguidilla de lesiones que evitó el meteórico ascenso que prometía posicionarlo como un inamovible de la defensa del FC Bayern y la selección alemana. Con apenas 25 compromisos disputados para los Rojos del sur desde diciembre, 2012, la magnitud de su estancamiento hace parecer cualquier otra seguidilla de lesiones una ridiculez.
A sus apenas 20 años y 4 meses, hizo su debut para los bávaros, bajo el mando de Louis van Gaal -entre otros cambios, también ascendió al primer equipo a Thomas Müller, reubicó a Schweinsteiger al centro del campo-. y con el tiempo logró desentonar lo suficiente en el club como para que un rutinario como Lúcio se marchara.
Su personalidad, aguerrida, y lo testarudo que siempre se suponía daba buenas sensaciones en camerinos bávaros y alemanes por igual. En él había una esperanza de liderazgo que para aquella época parecía faltarle a esta selección pronto encaminada a ser campeona mundial el 2014.
Tras su debut en agosto del 2009, sufrió su primera lesión seria el 1ero de noviembre del 2010, por un lapso de casi 2 meses, perdiéndose 11 partidos con el Bayern. Había logrado una convocatoria de parte de Joachim Löw para el Mundial Suráfrica 2010, donde se desempeñó como central y lateral izquierdo. Regresó a casa con 21 años de edad y un tercer lugar en el torneo de selecciones más prestigioso. Se suponía esta sería una lesión puntual y volvería a seguir ascendiendo en los escalafones del FC Bayern. Y así fue, por un tiempo.
Llegaría la temporada 2012/13. Para todo fanático del Bayern, supone una temporada difícil de olvidar, pues tras el estrepitoso y también inolvidable 2011/12 -fue la campaña del triple fallido: se quedó segundo en la Bundesliga, subcampeón en la DFB Pokal y, la más dolorosa, subcampeón como local en la Champions League-, vino la reivindicación y el Triple ganado.
Esa misma temporada, Badstuber sufriría dos lesiones: una poco severa, un desgarre, que lo marginaría del campo por poco menos de 2 semanas. Pero tres fechas después, Holger caería víctima de una ruptura de ligamentos cruzados en su rodilla derecha que se complicaría y sería el comienzo de la pesadilla del protagonista de este relato. Justo cuando parecía haber superado lo más fuerte -4 meses afuera-, sufrió una recaída que llevaría a que este defensa central de apenas 23 años en el momento, a deber estar alejado del juego por un total de 532 días. Se lee fácil, pero en ese transcurso de tiempo, Badstuber no estuvo disponible en 124 ocasiones para su equipo.
Volvería a estar disponible para el Bayern poco después de ello, pero duraría poco tiempo antes de otra larga lesión. Una ruptura de tendón marginaría al central por la primera mitad de la temporada 2014/15, en total 112 días y 21 partidos. Su retorno sería para el 2015 y la segunda fase de dicha campaña. Estaría sano por un par de meses, hasta marzo, cuando una inflamación lo forzaría a perderse un partido y 11 días de acción; ello fue la antesala a la segunda lesión más larga hasta el momento en la carrera de Bastuber.
193 días y 25 partidos, el defensor fue baja debido a un desgarre en un muslo. Ese 23 de abril fue su último día para dicha temporada. Su regreso, seis meses después, llegaría para el 2 de noviembre del 2015. Había estado disponible desde la fecha 12 hasta la actual 21, cuando ocurrió la cuarta gran lesión: fractura de un tobillo que lo dejará fuera de acción posiblemente por el resto de la temporada. En el mejor de los casos, hasta mayo, justo en la recta final.
La carrera de Badstuber es imposible de resumir en éxitos deportivos, pese al hecho que su equipo ha ganado la Champions League, 4 Bundesliga, 2 DFB Pokal, dos Supercup alemanas, una Recopa UEFA y el Mundial de Clubes, desde que Holger hiciera su debut.
Tampoco puede contarse su carrera en ciclos de entrenadores, pese a que hasta el momento ha estado bajo el tutelaje de Louis van Gaal, Jupp Heynckes y Pep Guardiola, de largo tres de los técnicos más influyentes en el fútbol del siglo XXI. Debe contarse en partidos y días perdidos debido a lesiones y en temporadas incompletas.
A sus 26 años de edad atraviesa ya al menos 90 días adicionales a los ya 921 días perdidos ( 2,53 años) por lesión, y el prospecto de no poder jamás volver al nivel que alguna vez debió alcanzar. Una convocatoria a la selección alemana para la Euro 2016 no estaba descartada, hasta hoy 13 de febrero.
Tras tanta tragedia resulta como algo no coincidencial que sea él quien tenga el temperamento que se adueñaba de un vestidor, incluso a la joven edad de 20 años y recién debutando en primera división. Requiere una fortaleza psicológica y una resiliencia inigualable para pararse tras tantas caídas y lesiones. Badstuber no es el común jugador de fútbol, ni tiene por qué serlo. Muchas lesiones han forjado en él una temple capaz de ganar cualquier torneo, el día que su físico no sufra el desgaste del juego. Esperemos ese día llegue más temprano que tarde.
Se sea hincha o no del Bayern, pocas cosas resultan más tristes en el fútbol que la historia de una promesa incumplida forzosamente. Holger el Pechvogel es un injusto pero merecido resumen de su carrera.
jose
Desgraciadamente su carrera de alto nivel en el Bayern tiene que finalizar esta temporada. Tenemos que venderlo, no podemos tener una línea defensiva de centrales tan frágil con gente tan poco fiable como Javi, Benatia y el propio Badstuber. Tenemos que vender tambien a Benatia ya. Necesitamos centrales fiables de alto nivel. Triste pero Bastuber no tiene sitio. MIA SAN MIA