Max Kruse sobre su fichaje por Wolfsburg: «Quiero mantener mi nivel de vida»
La salida de Max Kruse de Union Berlin en dirección a VfL Wolfsburg fue uno de los movimientos más destacados del mercado invernal en la Bundesliga, al igual que uno de los más polémicos. El veterano delantero dejó un equipo en puestos europeos para pelear por la permanencia con Los Lobos con una sustancial oferta salarial. En declaraciones a ZDF, admitió que tenía que hacerlo para «mantener su nivel de vida».
«Si quiero mantener mi nivel de vida, no hay otra manera»
Los hinchas Unioners no perdonan la marcha de su estrella cuando peleaban por los puestos de Champions League. Kruse duplica en Wolfsburg el salario que recibía en Union Berlin, y con 33 años y acercándose el final de su carrera, afirmó que era una decisión necesaria para poder permitirse su vida fuera del césped.
«He de ser sincero en eso. Si quiero mantener mi nivel de vida, no hay otra manera.»
Bien conocida su afición al póker y a la vida nocturna, el delantero comentó que gran parte del dinero de su cuenta va destinada a comprar coches e inmuebles.
«Tengo un punto débil en los coches. Intento comprar coches que tengan gran valor, y que luego pueda vender si es necesario. También destino mucho dinero a inmuebles.»
Además de reconocer que «no sería capaz de poseer mucho dinero a largo plazo», Kruse admitió que sólo quiere disfrutar lo máximo posible los años que está viviendo.
«Vivo en el aquí y en el ahora. No me gustaría tener 60 años y guardar miles de millones de euros en mi cuenta bancaria. Sólo eres joven una vez y sólo se vive una vez.»
La relación con Fischer también tuvo que ver en la decisión de Kruse
Hablando sobre su estancia en An der Alten Försterei, Kruse señaló que la relación con Urs Fischer, técnico de Union Berlin, se fue deteriorando y fue otro de los factores que determinaron la salida del club del este de la capital alemana.
«Mi relación con el entrenador también tuvo algo que ver. No estábamos enemistados pero diferíamos en un par de aspectos… Pasé un tiempo genial en el Union, sin duda. Pero el segundo año no fue como el primero.»
Su antiguo equipo ya empieza a echarle de menos, y es que han perdido los dos partidos que han disputado desde su marcha, sin anotar y cayendo fuera de los puestos europeos. Su sustituto, Sven Michel, tiene muy complicado tapar el agujero que existe en el ataque.
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En Wolfsburg ya está dejando su sello
Mientras tanto, Kruse en el césped está demostrando que el dinero que Wolfsburg le ofrece está siendo bien invertido. Los Lobos suman dos victorias consecutivas en liga, cortaron una sequía de tres meses sin ganar en partido oficial, y crearon un colchón de puntos sobre los puestos de descenso. Todo ello con su nuevo delantero tirando del carro y anotando un gol decisivo en el triunfo sobre Eintracht Frankfurt. Aún queda mucho para asegurar la permanencia pero se respira un mejor ambiente para el conjunto de la Baja Sajonia. Mientras todo siga así, a nadie en el vestuario del Volkswagen Arena le importará que Kruse compre un par de coches nuevos para celebrarlo.