Previa de la final de la DFB Pokal: Der Klassiker en Berlín
Todo está preparado para la disputa de la 73ª edición de la final de la DFB Pokal que enfrentará a los dos mejores equipos alemanes del momento. En competición doméstica se han visto las caras en dos ocasiones finalizando 5-1 en Baviera y con un muy competido 0-0 en Dortmund.
Los bávaros llegan a la final después de haberse proclamado campeones de la Bundesliga por vigesimosexta ocasión dos jornadas antes de finalizarla. Este año han visto como el propio conjunto aurinegro las ha seguido de cerca a una distancia que ha oscilado siempre entre los 4 y los 7 puntos, terminando en 10. Este encuentro será el último de Pep Guardiola, un técnico siempre ambicioso y que querrá despedirse de Alemania logrando el título copero antes de emprender una nueva etapa en el Manchester City. En dicho partido no podrá contar con Mario Götze, mientras que Arjen Robben será duda hasta última hora.
Por su parte, los de Thomas Tuchel han finalizado segundos en liga estableciendo el mejor registro de la historia del club, el cual les habría bastado para ganar 49 de las 52 ediciones anteriores de la Bundesliga. Pese a este hecho histórico, han sido subcampeones y fueron eliminados en los cuartos de final de la UEFA Europa League de una forma muy dolorosa, encajando tres goles en 20 minutos, siendo el decisivo en el tiempo añadido. Este sabor agridulce podría revertirse en caso de ganar la competición copera, tal vez no la más importante, pero resultaría una gran inyección de moral el hecho de hacerlo frente al máximo competidor en la actualidad. Las bajas de los aurinegros serán Neved Subotic, Joo-Ho Park e Ilkay Gündogan. Podría haber sido el último partido del mediocentro alemán en caso de haberlo podido jugar, puesto que su renovación esta atascada.
El partido se presenta interesante por el hecho de ser los dos mejores clubes de Alemania y por las variantes tácticas que hemos visto utilizar a Tuchel para enfrentarse a los bávaros. En el encuentro del Allianz Arena quiso optar por ubicar a Gonzalo Castro en el lateral derecho, posición que ya había ocupado en alguna ocasión con el Bayer Leverkusen, pero tal y como ya había ocurrido anteriormente frente al Odds en los playoff de la UEFA Europa League el experimento resultó fallido. Tuvo que reimprovisar en el mismo momento una reconstrucción de la alineación, lo cual permitió al Bayern ejercer su juego y dar una verdadera reprimenda al Dortmund.
Sin embargo, en el envite del Signal Iduna Park, el técnico nacido en Krumbach optó por una 4-3-3 poniendo a Erik Durm como medio derecho. Cuando la posesión era suya se quedaba en el centro del campo cerca de la línea de cal, pero cuando el esférico estaba en manos del Bayern, Pisczek se incrustaba al lado de los zagueros para que el propio Durm fuese el lateral derecho, formando así una rocosa línea de 5 que dificultaba la labor de la ofensiva de los de Pep Guardiola. Además, el joven futbolista se incorporaba al ataque con total libertad gracias a los desmarques de Aubameyang, Reus y Mkhitaryan. Creó peligro en más de una ocasión gracias a sus diagonales y a los espacios que dejaban los zagueros que perseguían a otros futbolistas.
En dos encuentros frente al Bayern ha habido un planteamiento bastante erróneo y otro que ha resultado efectivo para rascar un punto. Veremos a ver si esta vez Tuchel es capaz de alzarse con la victoria y lograr la cuarta DFB Pokal para las vitrinas del Dortmund, un título que no alcanzan desde el curso 2011-12. Por otro lado, si los bávaros son los vencedores ya sumarán 18 copas en su palmarés.
Pase lo que pase tenemos asegurada una DFL-Supercup entre los mismos equipos el próximo 14 de agosto, pero eso no quita que el partido de mañana será una vez más el mejor de la temporada.