El refuerzo que aún no cumple expectativas: Julian Draxler

Una de las transferencias que causó mayor furor en el pasado mercado de verano, fue la de Julian Draxler; del Schalke de sus amores, al subcampeón de la Bundesliga pasada y campeón de la Copa de Alemania: VfL Wolfsburg. El recién llegado entrenador de “Los Azules Reales”, André Breitenreiter fue el principal detractor de este cambio, pero 22 millones de euros fueron una cantidad insostenible para retener al jugador en su club de sentimiento y origen.

Al llegar a “Los Lobos” se ponían en él las esperanzas propias de quien ve en el jugador aquel factor que daría el salto de calidad a un club que busca cada día ser mejor; para pasar de un buen a un excelente equipo. No obstante, al terminar la primera rueda de la esta temporada se puede dar un balance parcial que no ha sido lo esperado.

Hasta el momento, Draxler ha jugado 14 juegos por Bundesliga, 5 por UEFA Champions League y 2 de Copa de Alemania. Su posición como mediocampista ofensivo ha sido la más usual con 11 ocasiones. Igualmente se ha desempeñado en 8 ocasiones como volante por izquierda y 1 por derecha: para sumar así en total 1.490 minutos.

Sin embargo, más allá de los números su desempeño no ha estado acorde con la expectativas de aficionados y dirigentes, ya que no se ha convertido aún en el jugador notable y extraordinario que se pensaba al concretar su transferencia. Con su fichaje por el equipo verde, se pensaba en principio reemplazar a Kevin De Bruyne, quien se marchó al Manchester City, y de paso ser el creador de múltiples opciones de gol y superestrella del club: aspecto que se ha cumplido, pero no a la medida pretendida.

Quizá aún esté en su fase de asimilación a la nueva institución, ya que este es su segundo club en su carrera deportiva. Además, esta oportunidad se ve como un salto de calidad y un escalón más para su palmarés. Ahora se le ve como una realidad y no como un prospecto que debe verse en los partidos cruciales, contra rivales de igual o más peso que el Wolfsburg, tanto en Alemania como en los torneos europeos.

Por fortuna, un aspecto a destacar es que Draxler estado fuera de las lesiones. Solo estuvo fuera de un encuentro por un problema con uno de sus aductores. Y se destaca este ítem ya que en el periodo pasado le causo este inconveniente perderse gran parte de la temporada.

«Después del cambio no fue fácil acostumbrarse al nuevo entorno. Fue una situación completamente nueva. En general, me siento bien recibido. Había juegos allí donde fui muy fuerte, mientras hay juegos en los no», afirmó el Julian Draxler, quien fue campeón del mundo con la selección Alemania a los 21 años, en el Mundial 2014.

Ahora el dorsal número 10 del Wolfsburg espera aprovechar el parón invernal para descansar y luego ponerse a punto en la mini pretemporada, ya que en el 2016 afrontará varios retos como los son la próxima ronda en el torneo de campeones de Europa, llevar a su club a lo más alto en la liga y ganar un lugar en la convocatoria para defender los colores de su país en la Eurocopa de Francia 2016.