Sébastien Haller y un hito más en su vida: de tener cáncer a ganar la Copa África para su país
603 días luego de ser diagnosticado con cáncer, Sébastien Haller fue el héroe de Costa de Marfil al marcar el gol que le dio la Copa África a su país.
Sébastien Haller y Costa de Marfil, una historia de redención
Al igual que Didier Drogba alguna vez, Haller era la figura del equipo de los Elefantes. Sin embargo, parecía que no podría jugar ningún papel en la competición, ya que sufrió una lesión en el tobillo jugando para el Borussia Dortmund en diciembre.
La misma le impidió participar de la fase de grupos, en la que los marfileños estuvieron al borde de una humillante eliminación. Parecía que todo terminaba después de una sorprendente derrota por 4:0 ante Guinea Ecuatorial en su tercer partido. De todas maneras, lograron pasar como el último de los cuatro mejores terceros clasificados.
Haller regresó y pudo tener minutos desde el banco bajo el mando del entrenador interino Emerse Fae, designado a mitad del torneo para reemplazar al despedido Jean-Louis Gasset, cuando Costa de Marfil se enfrentó a Senegal en los octavos de final.
El delantero marcó en la tanda de penaltis en el triunfo sobre los vigentes campeones. Luego, volvió a desempeñar un papel importante como suplente en la espectacular victoria de cuartos de final sobre Mali. Finalmente, se ganó la titularidad en la semifinal y fue su volea la que derrotó a la República Democrática del Congo.
En declaraciones al Canal Plus Afrique después de ese partido, le restó importancia a su propio papel en el triunfo:
«Es cierto que cometimos algunos errores al principio de la competición, pero tal vez ahora seamos un equipo diferente. Realmente no pensaba que tuviera que marcar. Lo más importante era ayudar al equipo».
Como lo fue esta Copa para Costa de Marfil, la historia de Haller podría haber sido muy diferente. El futbolista nació en Francia y los representó hasta la categoría Sub-21, jugando junto a campeones del mundo como Benjamin Pavard y Ousmane Dembélé. Pero, como la llamada del seleccionador francés Didier Deschamps nunca llegó, aceptó la oferta en 2020 para jugar en el país natal de su madre. Así recordó su primer gol:
«Cuando marqué mi primer gol en mi primer partido internacional contra Madagascar, fue realmente extraordinario. Me sentí muy feliz».
La recompensa a una historia difícil
Haller jugó en la Costa de Marfil que quedó eliminada en octavos de final de la última Copa Africana de Naciones en Camerún. En ese momento, el exjugador del Eintracht Frankfurt era protagonista del Ajax, marcando goles en los Países Bajos y en la Liga de Campeones de la UEFA.
En julio de 2022, arribó a Dortmund como el hombre para reemplazar a Erling Haaland, que acababa de ser vendido al Manchester City. Sin embargo, le diagnosticaron cáncer testicular pocos días después de unirse, y siguieron varios meses de tratamiento, incluidas cuatro rondas de quimioterapia y dos operaciones. Su primer partido oficial con el club no se produjo hasta el 22 de enero del año pasado, contra el FC Augsburg.
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Tras anotar nueve goles en el período previo, llevó al equipo de Edin Terzić a liderar hasta la última jornada de la Bundesliga, cuando falló un penalti en el empate 2:2 contra el Mainz, lo que permitió al FC Bayern München superar al BVB por diferencia de goles y quedarse con el título.
Ha habido poco de qué destacar a nivel de clubes desde entonces para Haller, quien no ha sido titular en un partido para el Dortmund desde septiembre y no ha marcado desde que anotó un doblete en una eliminatoria de DFB-Pokal, el pasado 12 de agosto.
Aun así, fue llamado para el torneo en su país y su recuperación parece haber llegado en el torneo de naciones, con el punto máximo en la definición por el título. Con una volea certera, anotó el 1:2 final para darle el tercer trofeo continental a Costa de Marfil. Un envión anímico con quienes más lo han apoyado y que podría revivir su carrera a nivel de clubes.
