Hannover 96 parece sellar su funesto destino
Con el paso de jornada tras jornada, la esperanza de todos los que conforman el Hannover 96 por mantener la categoría se desvanece más y más. El pasado fin de semana, en su visita a Bremen “Los Rojos” perdió por goleada 4-1 y ya están a cuatro puntos de la decimoséptima posición, ocupada hoy por el Hoffenheim. El presente futbolístico no da sensaciones de cambio y la nube negra de descenso se ve cada ocasión más cerca.
No ha servido, hasta el momento, ni los esfuerzos de las directivas, ni los cambios del entrenador. Inclusive las variantes tácticas en los encuentros no han dado frutos para conseguir sumar y zafar de la desesperante situación que viven hoy los de Baja Sajonia. De los últimos 10 partidos se han perdido nueve y solo se ha conseguido una victoria. Un balance pobre de 17 puntos solamente, tras 25 jornadas.
Ni el talento de unas de sus figuras, el mediocampista japonés, Hiroshi Kiyotake es suficiente para generar las opciones que se conviertan en los goles tan extrañados en la institución. Es más en la pasada jornada el ataque del 96, tuvo no solamente Kiyotake como representante del balompié asiático, sino a su compatriota Hotaru Yamaguchi, en una alternativa inusual del entrenador Thomas Schaaf.
Sin embargo, luego de 35 minutos y dos goles en contra el plan se derrumbó. Y el viejo entrenador del Bremen, abandonó el experimento y decidió sustituir a Yamaguchi por un delantero neto, el húngaro Adam Szalai. Regresando a Kiyotake a su posición como mediocampista ofensivo y el recién ingresado en su lugar natural.
Desde el principio el equipo tuvo muchos problemas con la ofensiva del Bremen y se salvó de varias ocasiones. La falta de lucha le salió cara ya el minuto 36. Pero quizá eso ayudó a despertar al equipo y el gol de Karaman, antes de finalizar el medio tiempo fue un espejismo de una remontada que nunca llegó. El Bremen apretó el acelerador en el segundo tiempo y selló el 4-1. La misma cantidad de goles recibida la pasada fecha ante su rival-vecino, VfL Wolfsburg.
“Todo lo que uno puede imaginar puede pasar. Aunque, por otra parte, hay un remedio: luchar para que no ocurra. Hemos atravesado una fase del juego que nos ha dado un poco de esperanza, pero no ha sido suficiente. Basta con mirar el marcador y también a manera en la que nos hemos dejado ganar. Entre otras muchas cosas”, aseguró el adiestrador Schaaf.
«Uno tenía la sensación de que iba a pasar lo mismo que contra el Wolfsburg. Aunque no hemos jugado así de mal. Sin embargo, seguimos recibiendo goles innecesarios” agregó el dorsal número 10 del 96
Por lo mostrado en el terreno de juego, el miedo al descenso paraliza a todos los jugadores. Los de Hanóver no muestran tener el nivel para permanecer en la primera Bundesliga y algunos ya ven las fechas restantes como la preparación para afrontar su nuevo reto en segunda división.