Análisis del mercado: Dortmund, Leverkusen

Dos de los tres pesopesados de este mercado alemán: Quienes terminaran en los cupos directos a la Champions League, como de esperar, son quienes mejor se refuerzan.

Schürrle sale, Son entra. Los protagonistas del verano en Leverkusen. Foto: SRF.ch

Leverkusen: Revisión a fondo

La gran noticia del mercado de fichajes para el Bayer Leverkusen es, sin lugar a dudas, la salida de André Schürrle. El jugador de 21 años, ídolo de la afición y hombre referencia para el equipo dejó a los Aspirineros por el Chelsea FC inglés, a cambio de una buena suma para el B04: 22 millones de euros, que el equipo no ha esperado para comenzar a gastar.

Tras la salida de Schürrle, se anunció la llegada del surcoreano, Heung Min Son, del Hamburger SV. El coreano probaría ser un recambio natural del alemán, a la vez que también vendría a un precio mucho menor y a la misma edad que André.

Otro movimiento de impacto fue el regreso de Carvajal a España, tras solo una temporada en Alemania. Su aporte al Leverkusen fue considerable, siendo él uno de los laterales que más asistencias y goles aportaría en toda la Bundesliga. A cambio, quedarían unos 6 millones de euros adicionales para las arcas aspirineras.

Las bajas adicionales a Carvajal y Schürrle serían: Jörgensen (FC Koebenhavn), Fernandes (cedido al Dinamo Zagreb), Hosogai (Hertha Berlin), Schwaab (VfB Stuttgart), Kramer (cedido a Borussia Mönchengladbach), Rensing (Fortuna Düsseldorf), Kadlec (Fenerbahçe) y Friedrich (sin destino aún).

Dichas salidas suponen una revisión de las actuaciones y de las inversiones realizadas en prospectos que no terminaron convenciendo, en buena medida. Nombres como Hosogai, Fernandes, Jörgensen comprueban esto. Otros, como Kadlec y Rensing, quizás estaban en necesidad de un cambio, simplemente.

Sus lugares serían llenados por una mezcla de experiencia y prospectos. Con un bastión fuerte de jugadores provenientes de ligas mediterráneas, el Bayer Leverkusen solidificó sus líneas con viejos conocidos y con nombres que aspiran a ser recordados en los venideros años.

Roberto Hilbert (Besiktas), Emir Spahic, Andrés Palop (ambos del FC Sevilla), Robbie Kruse (Fortuna Düsseldorf), Giulio Donati (Internazionale), Konstantinos Stafylidis (PAOK Thessaloniki), Levin Öztunali (Hamburger SV sub19), así como los canteranos Jonas Maffert, Nico Perrey y Luca Dürholtz, los dirigidos por Sami Hyppiä buscan un balance de sabiduría y vigor.

Las metas que este equipo se haya podido trazar deben ser algo obvias a ojos de conocedor de la Bundesliga: nuevamente, un puesto directo en la Champions League, así como sobrevivir la ronda de grupos del máximo certamen europeo. Si bien las bajas de Carvajal y Schürrle probarán ser de peso, la permanencia de Kiessling, L.Bender, Leno, Castro, Wollscheid y Sam, así como la inclusión de los acelerados Son y R.Kruse, pudiera darle mordida a un equipo con hambre.

Junto a Matthias Sammer, Mario Götze revela su número 19. Foto: welt.de

Borussia Dortmund: Evitando el desarme

Todos aquellos ajenos al FC Bayern München simpatizaban con este equipo en la final de la Champions League. De recursos más limitados que sus vecinos sureños, con un plantel joven y resultados extraordinarios (primeros en el grupo de la muerte, épica remontada ante Málaga, goleada al Real Madrid), el BVB se ganó el corazón del mundo en la pasada campaña.

Dicho enamoramiento fue caníbal, puesto que acto seguido al final de la temporada, comenzaron a llover las ofertas por los pilares del equipo: Hummels, Subotic, Schmelzer, Piszczek, S.Bender, Gündogan, Götze, Reus, Blaszczykowski, Lewandowski y compañía eran el tema en voga. Cada grande de Europa pretendía a uno de ellos, si no es que dos. Serían sus rivales de la mencionada final europea, FC Bayern München, los únicos que lograrían pescar en ese revoltoso río.

La prensa alemana anunciaría la venta de Mario Götze al FCB el día antes del trascendental partido en casa ante el Real Madrid, por las semifinales de la UCL. El monto a pagar, 37 millones de euros -cifra récord por un jugador alemán-, sería producto de una cláusula en el contrato de Götze con el Dortmund; algo que enfureció a la directiva aurinegra. Los bávaros también pretendían a Robert Lewandowski, pero el presidente del BVB, Hans-Joachim Watzke, logró frenar eso a tiempo con un veto a la salida del goleador polaco.

Mkhitaryan, el armenio de 27 millones. Foto: Eurosport

Sin embargo, ese dinero que entraría por la salida de Götze engordaría la ya inflada cartera del Dortmund. Entre el aumento en ingresos por derechos de transmisión, el dineral que supone alcanzar la final de la Champions League y un considerable aumento de interés en la mercancía que vendía el BVB, los dirigidos por Jürgen Klopp contaban con suficientes recursos para blindar la escuadra; y algo así han apuntado a hacer.

De momento, sólo tres fichajes han implicado un desembolso del equipo a cambio de sus nuevos jugadores: Sokratis (Werder Bremen; 9,5 millones), Aubameyang (Saint-Etienne, 13 millones) y Mkhitaryan (Shakhtar Donetsk, 27,5 millones). Estas figuras aportan recambio y refuerzos en la defensa, mediocampo y delantera; algo que viene bien, si el plan es mantenerle el paso a un galopante FC Bayern. Junto a estas compras, también están las promociones de Marian Sarr, Marvin Ducksch y Jonas Hofmann, todos producto de la cantera de este Borussia .

Sumada a la baja de Mario Götze, también tenemos las de Leonardo Bittencourt (Hannover 96), Moritz Leitner (cedido por 2 años al VfB Stuttgart), Felipe Santana (Schalke 04) y Patrick Owomoyela (sin destino). Adicional a ellos, están tres casos especiales del equipo, los cuales eran jugadores cedidos en otros clubes de menor estirpe -dos de la 2.Bundesliga y el colista de la 1.Bundesliga-, quienes fueron transferidos a equipos más sólidos y fuertes: Julian Koch (estaba cedido en MSV Duisburg, vendido al Mainz 05), Lasse Sobiech (estaba cedido al Greuther Fürth, vendido al Hamburger SV) y Daniel Ginczek (estaba cedido al Sankt Pauli, vendido al 1.FC Nürnberg).

La meta para el BVB es reiterarle a Alemania que es un equipo serio, no un contendiente esporádico. Es dar pelea seria por la Bundesliga -por más difícil que parezca- y dar nuevamente buenas sensaciones en la Champions League. Sus compras, si bien puntuales, son compras que tapan salidas y añaden calidad y profundidad a una plantilla joven pero experimentada.