Dortmund-Schalke: La madre de todos los derbis
Este fin de semana es la versión número 87, por Bundesliga de Derbi del Ruhr, rivalidad que enfrenta al Borussia Dortmund contra el Schalke 04. Es tiempo de derbi y con ello resurge una rivalidad que va más allá de fútbol. Es un choque de ciudades vecinas de la Cuenca del Ruhr, región donde el balompié se siente con más pasión que cualquier otra en Alemania.
Desde sus inicios es un partido que atrae a multitudes: es una rivalidad con tradición. Para los hinchas del Dortmund es un partido de “piel de gallina” y prefieren solo pensar que “la única opción es ganar. Es un rivalidad única en toda Alemania”. Mientras tanto, para los del Schalke “es mejor que ganar el campeonato”. La distancia en línea recta que separa al Signal Iduna Park en Dortmund del Veltins Arena en Gelsenkirchen es de 27,52 km. Medida que no logra separar sentimientos de confrontación que estallan en el corazón los aficionados de ambos clubes.
El balance está equilibrado en los resultados. Es decir, en Gelsenkirchen suele ganar Schalke y en Dortmund los negriamarillos acostumbran a quedarse con el triunfo. En total los amarillos tienen 31 victorias y los azules 30 y han empatado en 25 ocasiones. Cifras que muestran la verdadera paridad histórica de este enfrentamiento.
Para algunos será su primer derbi
Los dos directores técnicos debutarán este domingo, 8 de noviembre, en el gran partido de la región carbonífera de Alemania. Thomas Tuchel (Dortmund) llega mejor que André Breitenreiter (Schalke 04), pero ambos saben que este partido es más que especial y no se juega por lo puntos, sino por el honor de la ciudad y de las hinchas.
El fin de semana pasado, el entrenador, del segundo de la clasificación, dejó sus impresiones al reportero de la Bundesliga sobre este choque: “A partir del viernes solo pensamos en el derbi. Sabemos que después de la liga, la copa y la copa de Europa es la cuarta competencia en importancia. Saldremos con todo y haremos hasta lo imposible para dar alegría a nuestros hinchas”.
Por su parte, el guía del cuarto en la tabla opina que: “la atención crece poco a poco. Es el derbi de derbis. Ya quiero que llegue mi primer derbi. A medida que se acerque el partido nos iremos concentrando cada vez más y así podremos llegar al encuentro con la máxima motivación. Intentaremos ganar y si es no es posible, por lo menos les romperemos el pasto”.
“Aunque no estamos tan bien armados, si uno ve la lista de jugadores tenemos oportunidad de ganarle al Dortmund. Tenemos un equipo que puede jugar cohesionado. En muchos partidos hemos mostrado mucho carácter. Jamás nos damos por vencidos y jugamos un fútbol atractivo y ofensivo. Si convertimos las oportunidades que se nos presenten podemos salir victoriosos del estadio”.
Los azules reales depositarán sus esperanzas en el mediocampista ofensivo de 19 años, Leroy Sané, quien recientemente ha sido seleccionado para el combinado mayor, y ha exhibido en el inicio de la temporada una gran técnica en el manejo del balón y en la anotación de importantes goles para su club. “Cuando era más joven, solía mirar los derbis; incluso en el estadio. Ahora los juego: es muy emocionante. Me gusta”: afirmó el número 19.
Otra opción en la ofensiva del equipo es el delantero camerunés-alemán, Eric Maxim Choupo-Moting, jugador familiarizado con Tuchel ya que fue su entrenador en su época en Maguncia 05: “Queremos ganar este partido, pero no será fácil: el Dortmund tiene un equipo muy fuerte y un gran entrenador, que conozco desde mis tiempos en Maguncia 05. Será complicado, pero esforzándonos al máximo todo es posible” .
Mientras tanto, si hay alguien que conozca qué se siente jugar un partido de estos en Dortmund, es el exdelantero del club y actual anunciador del estadio, Norbert Dickel. “Antes de un derbi siempre duermo mal. Es un partido a muerte. Durante de la dos semanas previas al derbi no se habla de otra cosa en la carnicería o en la panadería que no sea este juego”.
“Estar ahí es algo que entusiasma a cualquiera y si además anotas un gol es sentimiento fantástico: sobretodo en la tribuna sur. Ahí sí que dan ganas de saltar a la reja para festejar con los hinchas: es algo muy especial. Se lucha por el predominio en la Cuenca del Ruhr y si le sacas ventaja a los azules tienes las mitad del camino recorrido. Puedes perder 5 partidos, pero si ganas el derbi haces felices a todos. Todos sonríen y la vida es bella”.
Encuentros destacados recientes
En la última década, estos partidos se han llevado a un nivel emocional fuera de lo establecido. Prueba de esto, es caso del delantero polaco Euzebiusz “Ebi” Smolarek quien vivió uno de los momentos más recordados de todos los tiempos, cuando convirtió en e segundo tiempo el segundo gol de la victoria del triunfo del Dortmund en 2007, cuando su archirrival era el casi campeón y en su visita al estadio del Dortmund caen 2-0 y pierden su oportunidad de coronarse campeones luego de 49 años.
Recuerda Dickel: “Echarles a perder el campeonato a los azules, ganar 2-0 y un torneo discreto y todo está bien. Es un día de celebración para cualquier hincha del Dortmund”.
En 2008, primer derbi del recordado entrenador Jürgen Klopp, vivió un decepcionante comienzo de partido ya que el Schalke lo vencía por 3-0, pero luego de una heroica remontada; en el minuto final el Dortmund logra empatar con un gol del suizo Alexander Frei. La hinchada estalla de alegría.
Recapitula Norbert: “Sufrí mucho, fue brutal. Era 3-0 en casa contra los azules. Uno se siente mal y sí soy honesto. Nunca tuve el sentimiento de que podríamos recuperar esta situación”.
“Jamás he visto un ambiente así. El estadio completo estaba fuera de sí. Todos se abrazaban y estuvimos a punto de ganar. Si el partido hubiera durado dos minutos más, hubiéramos metido el 4-3. Fue un derbi extraordinadio”.
En definitiva, Dortmund sale como favorito gracias a su posición en la tabla y su desempeño en copa y Europa, En el Schalke es el humor no es tan alegre como en su rival. Tras el mejor inicio de temporada de toda su historia, el club ha caído en un bache y espera que con un triunfo en el derbi retomar la buena senda.
Eso sí, cada vez que se encuentran estos dos rivales se olvidan que existen otros 16 equipos y que hay un campeonato y un premios por los cuales competir: solo importa vencer a tu más odiado rival y festejar con tu afición hasta que se acaben las fuerzas.